Este puede ser un año muy trascendente para los nativos del signo. Desde hace tiempo, se viene gestando la necesidad de cambios…, de aperturas…, de inicios de nuevos estudios…, empresas, o relaciones sociales… pero ahora ha llegado el momento de la verdad. Es un cambio de ciclo, en el cual, no caeremos en el tópico de decir “o ahora o nunca”, pero casi. Es el momento de replantearse su vida, averiguar cuál es su auténtica misión o camino en ella. Será un año en el que los capricornio deberán cuestionarse muy en serio que es lo que verdaderamente desean hacer, y dirigirse a ello, o lo más aproximado posible. Nuevas inquietudes o filosofías de vida serán las energías que gravitarán con intensidad en estos meses, aprovechen la tendencia favorable de los astros.
Es un año importante en este terreno. Precisamente por tener los astros a favor de energías renovadas, de cambios y de realizaciones, deberán prestar especial atención a este capítulo. Es hora de revisar que es lo que les pasa en cuestión de salud, ya que pueden venir arrastrando secuelas de dolencias pasadas. No temer afrontar los diagnósticos, sino todo lo contrario, informarse y obrar en consecuencia, ya que tienen todas las posibilidades, con los cuidados adecuados, de mejorar notablemente su estado físico, psíquico y emocional. De lo contrario, ignorando… desatendiendo… podrían dar lugar a problemas más serios en un futuro, ya que cuando entre Saturno de pleno en su signo, las cosas serán más difíciles de resolver.
Precisamente porque el año viene marcado por renovaciones y nuevos planteamientos de misión de vida, es más favorable para potenciar los cambios en el terreno profesional. En la vida sentimental,, para las parejas estables, se recomienda potenciar todo aquello que les une en cuanto a inquietudes o actividades, planteándose la posibilidad de inscribirse a temas nuevos, siempre que puedan aportar algo más a la unión. Para los que no tengan pareja, lo que deberán revisar y prestar atención, será especialmente a su aspecto, a su estilo de vestir, a cómo se comporta en sociedad, a la imagen que “venden” en definitiva. Tomar conciencia de cómo quieren que le vean, en aspecto y en inquietudes, y potenciar al máximo ese “buen marketing” personal. Nos guste o no, un buen aspecto “abre puertas”.
He comentado que es un año de aspiraciones profesionales realizadas, por tanto, en este terreno es donde más deberán volcar sus buenas energías, ya que podrán tener oportunidades de negocio, o de empresa o de iniciar o mejorar unos conocimientos profesionales que les serán de gran ayuda para esta etapa tan prometedora que tienen en los próximos meses. Por tanto, existen muchas posibilidades de que mejoren su economía o puedan crear nuevas entradas de dinero. De todas formas, el consejo es que si han de realizar una inversión económica en algún proyecto, sean muy prudentes, ya que estas buenas energías de expansión en positivo potencian, pero en negativo podrían dar con aumentar deudas. La mejora puede venir más por nuevos aprendizajes o reestructuración de la actividad ya existente, más que por inversiones arriesgadas.